História de Viladecans, Canis Vallis, Val de Cans o Villa de Canibus

Para entender el por qué de la situación actual en Viladecans, es bueno repasar los diferentes acontecimientos que han ido sucediendo en la zona desde la era de los mamuts que es el vestigio más antiguo encontrado en el municipio, tierra deltaica colindante con una falta montañosa en donde por su situación, el clima y los negocios desarrollados en el lugar siempre le ha costado desarrollarse.

Veamos a continuación una recopilación de la información que he ido recopilando de diferentes fuentes, al final del artículo encontraréis un listado con todas las fuentes utilizadas.[1]

La referencia más antigua que se ha encontrado a través de yacimientos paleontológicos corresponden a restos de mamuts encontrados en un embalse de laminación justo en lo que hoy es la desembocadura de la riera de Sant Llorenç antes de entrar en el barrio de Can Guardiola; se han encontrado restos de mamuts, rinocerontes y herramientas de sílex con cerca de 100.000 años de antigüedad.

Por otro lado, en la zona de Las Olivaretes, que a partir de 2020 promovido por nuevos planes urbanísticos, se conocerá cómo Pla de Llevant, en esta zona se han encontrado restos romanos, siendo los más antiguos los correspondientes a una Villa Agrícola Romana datada del Siglo I en las proximidades donde hoy se encuentra la Ermita de Sales del cementerio. [2]

Un descubrimiento de un barco hundido en la zona identificada cómo Les Sorres IV, donde había lo que se denomina en catalana cómo “Ancolatge” lo que indica que existía un embarcadero natural para el comercio marítimo de las viñas de Sales hacía Roma. Este comercio parece ser que se desarrolló hasta bien entrado el siglo III cúando se constituyo un asentamiento romano en el torrente de Sales.

Serán los alrededores de la riera de Sant Llorenç i, por otro lado, la Vila Romana en las proximidades de la actual ermita de Sales, los sitios más antiguos habitados en todo el municipio de Viladecans. [3]

• Siglo I, comercio Íbero desde el embarcadero de Les Sorres.
• Siglo III, Establecimiento romano del Torrent de Sales.
• Siglo IV, construcción de las canalizaciones de agua localizadas en Alba-Rosa.
• Siglo VI, Establecimiento romano de Can Guardiola.
• Siglo VII, Caida del imperio romano.

En el siglo XII, el pueblo ya había pasado por diferentes manos, Gavà y Viladecans estuvieron durante casi 3 siglos bajo la propiedad de una ilustre familia Burguesa, a mediados del siglo XI es cuando se encuentra la primera referencia a lo que podría ser Viladecans con el nombre de Canis Vallis o Villa de Canibus, que más tarde pasará a identificarse cómo El Lugar de Sant Joan de Viladecans, por esa época todo el municipio dependía de Sant Climent de Llobregat con dependencia eclesiástica de San Cugat del Vallés. Los vecinos de Viladecans tenían que desplazarse a Sant Climent para realizar cualquier actividad en donde participe la Iglesia o el rector, bodas, entierros, bautismo, etc…. [3]

La primera documentación que existe de la capilla románica del cementerio, que actualmente se conoce cómo Ermita de Sales, es entre los años 1143 y 1148, por aquel entonces se denominó con el nombre de Villa de Canes y alrededor agrupaba una pequeña villa de casas de familias dedicadas a la agricultura. [4]

No fue hasta el año 1313 cuando Hug de Cardona tras una visita a Castelldefels, convierte en clérigo a un estudiante en la capilla de la Villa de Canibus, siendo esta la primera referencia data con el nombre actual Viladecans.

Desde hace muchos siglos Viladecans ha tenido culto a Sant Joan Baptista y en lo que es hoy la plaça de la Vila con C/Jaume Abril se construyó lo que sería una pequeña capilla que atendería las necesidades de 20 casas y 200 familias, los orígenes de esta capilla datan anteriores al siglo XIII y estuvo en ruinas hasta finales del siglo XVIII; fue en 1591 cuando la capilla tuvo a Pere Molins cómo primer rector que ayudó y se involucró en su desarrollo. [5]

En el año 1562 Enric Agullana vende Viladecans y la torre burguesa a Hug Joan Fivaller de Palou, el 1652, el señorío de Viladecans pasará entonces a manos de los varones de Sant Viçens dels Horts y en el siglo XVIII se sucederá la independencia parroquial, por lo que, según esto parece que a partir de 1746 es cuando la parroquia se constituye formalmente cómo Lugar de Sant Joan de Villa de Canes, a pesar de existir ya una organización municipal de toda la zona, no hay documentación sobre este acontecimiento.

En el año 1652, los propietarios de Viladecans por aquel entonces, Miquel de Torrelles disponía de una propiedad en las marinas residencias con fortificaciones y piezas de artillería que se utilizaban cómo símbolo de su poder feudal, siendo este uno de los más recientes encontrados en el delta del Llobregat.

Cómo hemos visto anteriormente, durante el siglo XVII estuvo bajo el poder de Sant Climent, pero por las molestias ocasionadas por la distancia entre las 2 poblaciones y las dificultades de comunicación a través de la riera de Sant Climent, especialmente peligroso los días de lluvias, a inicios del Siglo XVIII se solicitó que la capilla tuviera un rector propio para abastecer el actual incremento de la población. [6]

No fue hasta 1717 cuando se le concede a Viladecans el derecho de poder disponer de un cementerio y rector propio en la capilla, a más de dar permiso para construir una iglesia propia que acabará siendo más parecida a lo que tenemos ahora.
El centro del pueblo de Viladecans data del siglo XVIII, por aquel entonces fue cuando se construyó el edificio donde reside hoy el ayuntamiento de Viladecans que está ubicado en un edificio histórico y protegido correspondiente a una casa burguesa denominada, Torre de Can Modolell al lado de la Torres Barò o Torre del Moro.

Un pueblo con 360 casas y 40 más repartidas por todo el territorio con 1197 habitantes en total donde la industria consistía principalmente en el prensado de aceite y un torno de obra; productores de grano, vino, algarrobas, legumbres y frutas en abundancia que se vendría en los mercados de Barcelona; por la época dependía de la jurisdicción señorial del Barón de Sant Vicens. [7]

A partir del siglo XIX es cuando se inicia una colonización de la zona del delta de Viladecans en donde hay una amplia de tierra de cultivo, es entonces cuando se hacen las primeras menciones de Les Filipines y Les Afriques, al ser zonas inundables será común que aparecieran brotes de paludismo o fiebre tifoidea hasta finales de Siglo.

Los entornos climáticos de la zona, inundaciones, paludismo y enfermedades derivadas de esto junto con situaciones de sequía perjudica muy seriamente a la sociedad rural y agraria que depende del cultivo de secano y hace que el crecimiento de la población no sea sostenible para el mantenimiento de los cultivos agrarios.

Fue a lo largo de la Segunda Revolución Industrial, gracias a la inmigración que Viladecans pasó de ser un pueblo agrícola a un pueblo industrial sin tener una demografía extensa y con muchos entornos verdes en comparación con otros municipios más próximos a Barcelona. [8]

A lo largo del siglo XX se experimenta un gran crecimiento demográfico promovido por las diferentes transformaciones industriales y económicas de las proximidades de Barcelona, Viladecans pasará de ser un pueblo agrícola a un pueblo fundamentalmente industrial. [7]